Ayuntamiento, Generalitat y Área Metropolitana de Barcelona (AMB) han llegado a un acuerdo para aportar conjuntamente 10 millones de euros para cubrir el coste del sistema de transporte público de Barcelona. Dicha aportación —que reclaman que se amplíe con 10 millones más por parte del Estado— servirá para cubrir el déficit de 20 millones que supone congelar los precios de todos los títulos de transporte en 2017. Además, la T- 12 se ampliará hasta los 16 años, se facilitarán los descuentos para las personas sin trabajo y se creará una tarjeta bonificada para los días con mucha contaminación.
La nueva tarjeta ambiental —que aún no tiene nombre— se pondrá a la venta sólo los días que haya un episodio de contaminación, lo que ocurre entre 0 y 3 días al año. La intención es que la aprovechen los conductores para que ese día dejen el coche en casa y utilicen el transporte público. Para ello, el precio para la zona 1 será de 1,80 euros ida y vuelta, mientras que si compraran dos billetes sencillos les costaría 4,30 euros.
“Este acuerdo representa un gran esfuerzo por parte de las tres administraciones catalanas, que apostamos por el transporte público y lo hacemos con criterios sociales y ambientales“, destacó la alcaldesa, Ada Colau.
De hecho, tanto el Ayuntamiento como la Generalitat y el AMB han ido aumentando las aportaciones al sistema de transporte metropolitano, justo lo contrario que el Gobierno del Estado, que ha pasado de aportar 173 millones de euros en 2008 a aportar 98 este año. En el mismo periodo, el Ayuntamiento ha pasado de los 89 a los 128 millones de euros. Por ello, reclaman al Estado que asuma una parte del coste: “La ciudadanía pide que las administraciones dialoguemos. Hacemos un llamamiento al Estado para que se sume a ello. Es perfectamente asumible”, ha dicho Colau.
El acuerdo sobre la financiación del transporte público se ha escenificado en el Palau de la Generalitat. Junto con la alcaldesa, han comparecido el presidente Carles Puigdemont, el consejero de Territorio, Josep Rull, y el vicepresidente del AMB, Antoni Poveda.
