En los últimos años ha habido un aumento importante en la cantidad de financiación que se otorga a pequeños negocios. Esto ha causado que muchos empresarios consideren solicitar uno. Pero ¿cómo saber cuándo es el momento adecuado para pedir un préstamo para tu negocio?
Una inyección de efectivo puede ser lo que necesitas para llevar a tu negocio al siguiente nivel. Pero primero debes asegúrate de que las condiciones son propicias.
Llevas en el negocio tiempo suficiente como para conocer las posibilidades de tu sector. Eres tu propio jefe. Disfrutas haciendo lo que haces. Has creado un producto o brindas un servicio de calidad del que estás orgulloso.
Pero te das cuenta que el potencial del mercado es mucho mayor. Te encuentras en un dilema, tu negocio no acaba de despegar o se encuentra estancado.
Es el momento de dar un paso más allá. Si no dispones de los medios para lograrlo, siempre hay maneras de lograrlo. La solución natural sería obtener un préstamo para negocios, pero hay que hacer números para asegurarse de que es lo adecuado en este momento.
En qué áreas invertir tu préstamo para negocios
Lo primero que hay que decidir es en qué se invertirá ese dinero para poder estudiar la rentabilidad potencial de la inversión.
Las cuatro áreas principales en las que las empresas invierten para crecer están relacionadas con la contratación de personal, incrementar la producción, la incorporación de nueva tecnología o campañas de marketing.
Es muy probable que lo que está limitando tu negocio se englobe dentro de una de estas categorías, ya que todas ellas son cruciales para mejorar la calidad del producto o servicio y aumentar el volumen de producción o de ventas. El objetivo es ofrecer más y mejor a un precio competitivo.
Hay que analizar bien una inversión
Todo esto es más fácil si lo vemos con un ejemplo:
Francisco es un entusiasta del ciclismo y decidió convertir su pasión en un negocio especializado en bicicletas de montaña que está siendo muy rentable. Empezó importando productos de calidad de Alemania, lo que le dio prestigio a su negocio; más tarde incorporó productos de menor precio para abarcar todas las gamas.
Hace 5 años tuvo la idea de fabricar, a pequeña escala, sus propias bicicletas, ya que detectó una demanda no atendida en el mercado. Por aquel entonces, la crisis financiera provocó que sus ventas bajarán un 30%, por lo que decidió esperar para implementar su idea.
Durante 3 años de espera, elaboró una lista de clientes potenciales que le permitió asegurar ventas cuando finalmente le diera vida a su idea. Cuando finalmente se animó a tomar el préstamo, las ventas habían vuelto a despegar.
Desde hace dos años ya fabrica sus bicicletas. Pudo amortizar la maquinaria que necesitaba en cerca de año y medio. Con esas ventas, ya ha obtenido un beneficio aproximado del 30% sobre la inversión inicial, que le ha permitido cubrir el coste del préstamo y obtener un pequeño beneficio neto. Francisco espera aumentar los beneficios con nuevas ventas potenciales, ya que el mercado sigue creciendo.
Es momento de buscar financiación
En el caso de Francisco, la inyección de dinero le permitió crear un nuevo producto que le abrió nuevas posibilidades de negocio, incrementando las ventas y mejorando su imagen en el mercado. Pero tuvo la paciencia de esperar al momento adecuado; si no se hubiera detenido a hacer cuentas e investigar las probabilidades de tener éxito, su historia tal vez no habría sido la misma.
Puede ser que lo que necesites en tu negocio sea una buena campaña de marketing o contratar a un nuevo jefe de ventas.
En cualquier caso, es importante estar al corriente de las opciones de financiación a tu alcance para analizar cuándo es el momento propicio para dar el gran salto que tu negocio necesita para avanzar y alcanzar ese deseado objetivo de ventas.
Y quién sabe, es posible que el reciente incremento de financiación del que hablábamos al principio del artículo sea una señal de que ese momento ha llegado.







