El Ayuntamiento de EH Bildu y demás partidos del progresismo realizan su balance exaltando la masificación y la seguridad.
Por nuestra parte, lamentamos tanto la promoción previa del mes del orgullo transgénero, como una programación festiva que violenta a niñas (taller de binders, drags), cosifica y menosprecia a las mujeres (espectáculos drag) e introduce el término "no binario" como categoría similar al sexo en su balance de agresiones sexuales. Es preciso llamar la atención, asimismo, sobre la insistente negación de estos partidos y su Área de Igualdad de la grave exacerbación de la violencia del sistema prostitucional en unas fiestas descontroladas.
El balance dado de las agresiones sexuales supone, como siempre, una mínima parte de la realidad sufrida por las mujeres. Es contraproducente, además, dar una falsa sensación de seguridad que limite la alerta y el control. Se deben ampliar los horarios y puntos de información y atención a las agresiones, debe haber mayor implicación de peñas y autoridades y se debe interpelar a los hombres.
Las mujeres nos encontramos entre una izquierda y un feminismo posmoderno que promociona la cosificación sexual de la infancia y la mujer, y una derecha que promociona su sumisión. Es preciso cuestionar ambos modelos, al igual que tomar en cuenta el contexto estatal de los feminicidios, pues el patriarcado social e institucional, con sus leyes y pactos de estado, nos afecta por igual y no es posible reducirlo al ámbito local. Hay mucho por hacer.
Como partido político, en el PFAC estamos comprometidos con ello mediante una agenda feminista clara, refrendada ya por más de dos mil cuatrocientos votos en Euskal Herria en las últimas elecciones.
¡Únete!
Zatoz Gurekin!!!
Agrupación Territorial del PFAC