Como cada año, este jueves 8 de agosto, los vecinos y vecinas de la emblemática calle Santo Domingo del Casco Antiguo se vestirá de fiesta para celebrar las tan esperadas Fiestas de Santo Domingo. Este evento, profundamente arraigado en la comunidad, promete una jornada llena de tradición, alegría y participación vecinal.
Las celebraciones comenzarán puntualmente a las 13:00 horas con el tradicional chupinazo que dará inicio oficial a las festividades. A continuación, los sonidos festivos de los Gaiteros Ezpelur inundarán la calle, marcando el comienzo de un aperitivo popular donde vecinos y visitantes podrán compartir un momento distendido.
El ambiente se llenará de magia a las 15:00 horas con la aparición del gigante y kiliki de Santo Domingo, acompañados por Anuk e Iraia, quienes aportarán un toque especial a la jornada. A esa misma hora, los vecinos se reunirán en la Plaza de Santiago para una comida vecinal autogestionada, un espacio donde la comunidad se une en torno a la mesa para disfrutar de manjares caseros.
La tarde estará dedicada a la diversión y el entretenimiento con una serie de juegos de mesa que comenzarán a las 16:30 horas, seguidos por uno de los momentos más esperados del día: el encierro de toricos de cartón. A partir de las 18:30 horas, los más pequeños (y los no tan pequeños) podrán disfrutar corriendo por la calle Santo Domingo, desde los corralillos hasta el ayuntamiento, en una versión juguetona y segura de los tradicionales encierros.
La música de los dulzaineros de Haizeberri acompañará esta parte de la tarde, creando una atmósfera festiva que culminará en la cena popular autogestionada, programada para las 21:00 horas. En esta ocasión, la consigna es clara: cada quien traerá su silla y su mesa para disfrutar juntos en plena calle, haciendo de la cena una gran celebración comunitaria.
Para cerrar la jornada, la actuación musical de Luziano, el hombre orquesta, pondrá el broche de oro a las fiestas, desde las 22:00 hasta la medianoche. Esta presentación promete mantener la energía alta y el espíritu festivo hasta el último minuto.
