Especialmente en regiones costeras como Levante y Murcia, lluvias que pueden llegar a ser torrenciales.
Estas condiciones climatológicas afectan a la la eficiencia energética y el confort térmico de las viviendas. De ahí que preparar adecuadamente las ventanas y puertas sea fundamental para mantener el hogar protegido, tanto del frío como de la humedad.
España tiene todo un reto por delante en lo que a optimización energética se refiere. Desde hace unos años, zonas de Levante viven con las temperaturas suaves durante gran parte del año y pueden dar una falsa sensación de seguridad en cuanto a la necesidad de aislamiento. Sin embargo, con la llegada del invierno, el viento frío y las lluvias intensas pueden transformar la comodidad de un hogar.
Las lluvias torrenciales, frecuentes en estas zonas, no solo afectan el exterior de la vivienda, sino que también pueden filtrarse a través de ventanas y puertas mal aisladas, provocando problemas de humedad y daños estructurales a largo plazo. Además, el viento que acompaña a estas tormentas puede infiltrarse fácilmente por las rendijas, aumentando la sensación de frío en el interior y provocando que los sistemas de calefacción trabajen de manera ineficiente.
¿Cuál sería la mejor solución para mejorar la eficiencia energética? Según los últimos estudios, el uso de PVC es una de las mejores soluciones.
“Una de las soluciones más efectivas para preparar el hogar frente a las inclemencias del invierno, por nuestra experiencia, es la instalación de ventanas y puertas de PVC en Murcia y Levante. Este material ofrece múltiples ventajas, entre las que destacan su capacidad de aislamiento térmico y acústico, su resistencia a la humedad y su durabilidad en entornos costeros, donde la exposición al salitre y la humedad es constante” explican desde Acriper.
¿Cuáles son sus ventajas?
1. Aislamiento térmico: El PVC es un material con una baja conductividad térmica, lo que significa que ayuda a mantener el calor dentro del hogar en invierno y a bloquear el frío del exterior. Esto se traduce en una mayor eficiencia energética, ya que se reduce la necesidad de utilizar la calefacción constantemente.
2. Resistencia a la humedad: A diferencia de otros materiales como la madera, el PVC no se deforma ni se deteriora con la humedad. Esto es especialmente importante en zonas con grandes contrastes de temperatura y humedad y donde las lluvias fuertes pueden ser frecuentes en ciertas estaciones.
3. Durabilidad y mantenimiento: Se trata de un material muy duradero y resistente a la corrosión, lo que lo convierte en una opción ideal para climas costeros ya que no se ve afectado por los cambios de temperatura ni por la exposición a los elementos, lo que garantiza su buen estado a lo largo del tiempo.
Entre los consejos para mejorar aún más el aislamiento en esta temporada está el revisar el estado de las juntas para que no presenten fisuras y desgaste, instalar burletes en marcos para evitar la entrada de aire en una de las soluciones más sencillas y económicas. Verificar el sistema de cierre también es importante y más si se suman las cortinas térmicas.