LAB critica el acuerdo de UGT, CCOO, ATISS y Solidari que avala el cierre de la planta BSH en Eskiroz, con más de 600 despidos, tras un proceso “chapucero”.
Asimismo, se ha defendido que «no es xenofobia exigir seguridad», ni «intolerancia reclamar que se respeten las calles, las casas y la vida de los vecinos»
Barrena ha criticado la falta de humanidad de la dirección de BSH, recordando que la empresa “se publicita insistentemente subrayando su carácter humano"
La administración concursal había solicitado la extinción de los contratos ante la imposibilidad de encontrar inversores y la situación financiera insostenible