PALMA, 17 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Palma, José Hila y el presidente de Emaya, Ramon Perpinyà, han visitado este viernes los embalses de Cúber y del Gorg Blau para constatar el «magnífico nivel» de las reservas y el buen estado de las instalaciones después de la tormenta ‘Juliette’.
El primer edil ha señalado que el hecho de que tras la borrasca los embalses estén al 90 por ciento aporta «tranquilidad» de cada al verano ya que en noviembre llegaron a estar al 35 por ciento, una situación «muy preocupante».
Hila ha agradecido el «trabajazo» que ha hecho el personal de Emaya, tanto para cuidar de los embalses durante la tormenta como para cuidar de la ciudad y ponerla al día por los desperfectos que causó.
Según han indicado en una nota de prensa, la reserva de agua conjunta de los embalses se encuentra ahora mismo al 90 por ciento de su capacidad.
En concreto, Cúber está al 90,4 por ciento y el Gorg Blau al 87,8 por ciento, a pesar de que se extraen de forma continua 350 litros por segundo de agua para el abastecimiento de Palma.
A la ciudad ahora también llega agua de las fuentes de en Baster, de la Pera y de la Vila, que antes estaban secas, de forma que ahora se puede reservar el agua de los pozos para más adelante.
La tormenta ‘Juliette’, han recordado provocó importantes nevadas en la zona de la Serra de Tramontana donde están los embalses, por lo que las reservas han podido subir en unas tres semanas casi un 24 por ciento.
También han recordado que estas nevadas han llegado después de un otoño casi sin lluvias. A mediados de noviembre de 2022 los embalses llegaron a su nivel más bajo de la temporada, el 35 por ciento.
En cambio un año antes las reservas eran del doble, un 70,7 por ciento y poco después se llenaron con las lluvias llegando también al 90 por ciento a principios de diciembre de 2021.
La borrasca causó daños, por otra parte, en el acceso a la presa y estación de bombeo del Gorg Blau. Igualmente, era imposible el acceso a la presa de Cúber.
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