Agentes de la Policía Foral, adscritos a seguridad ciudadana, pudieron salvar la vida de un varón tras haber sufrido un atragantamiento en una terraza de la pamplonesa Plaza del Castillo.
Los hechos se sucedieron cuando una ciudadana requirió presencia policial por una persona atragantada a una patrulla que se encontraba en las inmediaciones de la ODAC (Oficina Denuncias Atención Ciudadana) en el Palacio de Navarra.
Los agentes se personaron de inmediato y, tras recabar información y confirmar que se encontraba con síntomas de amoratamiento, comenzaron a realizarle la llamada maniobra de Heimlich con el fin de intentar que expulsara el cuerpo extraño que le impedía respirar, que resultó ser un trozo de cruasán relleno de jamón. Tras dos minutos realizando la maniobra los policías forales consiguieron el objetivo y el varón, pamplonés de 70 años, fue recobrando la consciencia. Posteriormente personal sanitario llegado en ambulancia se hizo cargo de su valoración médica.
