El cribado de cáncer de pulmón en pacientes con EPOC permite diagnosticar el tumor en estadios tempranos con intención curativa. Así lo muestran los resultados pioneros de un estudio llevado a cabo por el Área de Cáncer de Pulmón del Cancer Center Clínica Universidad de Navarra (CCUN) y que han sido publicados en la revista científica Archivos de Bronconeumología. Estos datos han sido comentados en la Conferencia AGILE (Alliance for Global Implementation of Lung and Cardiac Early Disease Detection and Treatment), que se celebra en la sede de posgrado de la Universidad de Navarra en Madrid hasta el próximo sábado.
“Las guías internacionales recomiendan realizar el cribado en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Sin embargo, hasta ahora no contábamos apenas con datos sobre la eficacia del screening en esta población de alto riesgo. Con este estudio hemos visto por primera vez que el cribado permite un diagnóstico temprano y una supervivencia del 94%”, señala el Dr. Juan Pablo de Torres, especialista del Área de Cáncer de Pulmón del CCUN, codirector del Departamento de Neumología y primer autor de esta investigación.
Enmarcado en el proyecto IELCAP, iniciado en la Clínica Universidad de Navarra en 2001, la investigación ha contado con 865 pacientes con EPOC con un seguimiento medio de más de 8 años. En este tiempo, la prevalencia del cáncer de pulmón ha sido de un 2,6% y en su mayoría, un 74%, fueron detectados en estadio temprano. “Los pacientes con EPOC tienen entre tres y cuatro veces más riesgo de desarrollar cáncer de pulmón que las personas fumadoras, lo que pone de relevancia la importancia de este grupo poblacional en los programas de cribado”, añade.
En España, un 12% de la población adulta padece esta enfermedad altamente prevalente causada por el tabaco. Entre las principales causas de fallecimiento en estos pacientes se encuentra el cáncer de pulmón, por eso el cribado está incluido en las recomendaciones de las Guías GOLD (Global Iniciative for Chronic Obstructive Lung Disease), un consenso mundial sobre la estrategia para el diagnóstico, el manejo y la prevención de la EPOC.
La EPOC es una de las patologías denominadas como las ‘BIG3’, enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco y que pueden ser detectadas en el contexto de un programa de cribado de cáncer de pulmón. Junto con la EPOC, el propio cáncer de pulmón y las enfermedades cardiovasculares son responsables de casi la mitad de las muertes evitables en todo el mundo.
Por eso, ha sido uno de los temas abordados durante estos días en la Conferencia AGILE que se está llevando a cabo en el campus de la Universidad de Navarra en Madrid y que ha congregado a más de 80 expertos a nivel mundial, incluyendo representantes de Norteamérica, Europa, América Latina, Asia y África.
El impacto de la EPOC, su relación con el cáncer de pulmón y la eficacia de la tomografía computerizada de baja dosis (TCBD) como herramienta de detección precoz de estas enfermedades tan prevalentes han sido analizados por los expertos internacionales reunidos en Madrid durante este encuentro. Este es el segundo congreso liderado por el CCUN este año, congregando a especialistas internacionales dedicados al cribado de cáncer de pulmón, tras la celebración en abril de la reunión del consorcio SOLACE en Madrid.
Todo ello se lleva a cabo en el contexto del año SEPAR de detección precoz del cáncer de pulmón coordinado por el Dr. Luis Seijo, director del Departamento de Neumología de la Clínica Universidad de Navarra: “Estamos muy ilusionados este año con el inicio del proyecto CASSANDRA, un ambicioso estudio piloto a escala nacional de cribado de cáncer de pulmón, que combina prevención primaria y secundaria, el cambio de rumbo en Europa que anima a la implementación del cribado en la UE, y la celebración de estas dos reuniones en Madrid que ponen de relieve el liderazgo de nuestro país en el cribado de esta enfermedad que supone una de cada 5 muertes por cáncer en el mundo”.