Este lunes a mediodía familias del Instituto Alaitz de Barañáin se han concentrado frente al departamento de Educación, en la cuesta de Santo Domingo, para expresar su rechazo ante la supresión unilateral de un aula por parte de las autoridades educativas. La medida afecta a 20 alumnos preinscritos en el centro, dejándolos fuera del mismo para el próximo curso.
Según los afectados, esta decisión del Departamento de Educación implica un drástico cambio en el proyecto educativo del Instituto Alaitz, reduciendo el número de aulas disponibles y creando un entorno masificado que limita la elección de asignaturas optativas y, por ende, el futuro profesional de los estudiantes.
"La comunicación extemporánea de esta decisión nos ha dejado sin margen de maniobra, perdiendo así el derecho a elegir el centro de formación", señalan las familias afectadas. Afirmaron que ninguna de ellas tenía conocimiento de la supresión del aula al finalizar el período de preinscripción, lo que las dejó en una situación de incertidumbre y vulnerabilidad.
Según recordaron desde el Instituto Alaitz, la justificación dada por el Departamento de Educación se basa en una estimación histórica sobre la matriculación definitiva de alumnos en bachillerato. Sin embargo, las familias argumentan que el compromiso firmado por la gran mayoría de los alumnos preinscritos contradice esta estimación, alcanzando un 96% de compromiso real.
Ante esta situación, las familias han emprendido diversas acciones, incluyendo la presentación de instancias a la Dirección General de Educación, reuniones con grupos políticos locales y la presentación de quejas al Defensor del Pueblo. Sin embargo, hasta la fecha, no han recibido una respuesta oficial por parte de las autoridades educativas.
"Queremos mostrar nuestro total desacuerdo e indefensión ante una decisión tomada que implicará la imposición del centro educativo en el que cursarán nuestros hijos", expresan las familias convocantes.