El Campus de la Universidad de Navarra alberga, desde hace muchos años, refugios y cajas de apareamiento de murciélagos. En los jardines urbanos o periurbanos es necesaria -por seguridad- la poda o eliminación de los árboles viejos y, como consecuencia, los murciélagos arborícolas -como el nóctulo mediano- ven disminuidos los refugios naturales donde pasan buena parte del tiempo.
En este marco Juan Tomás Alcalde, biólogo y presidente de la Asociación Española para la Conservación y el Estudio de los Murciélagos (SECEMU), acompañado de un grupo de alumnos de los grados de Biología y Ciencias Ambientales de la Universidad de Navarra, han realizado un recuento de ejemplares y colonias en el Campus universitario, con el fin de detectar ejemplares en celo y valorar cuál es la presencia de estas poblaciones de murciélagos.
“Cada año la Universidad colabora en la sustitución de nuevos refugios de murciélagos en el Campus, y se evalúa la presencia de esta especie. Somos conscientes de la importancia que tiene mantener la biodiversidad del Campus por su valor intrínseco y además porque una buena salud de los entornos naturales es también beneficioso para el ser humano (One Health)”, dice Enrique Baquero, profesor de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra.
El Campus de la Universidad de Navarra, junto con otros parques de Pamplona, alberga una de las únicas siete colonias conocidas de una especie amenazada en España, el nóctulo mediano (Nyctalus noctula). La población de Pamplona ha sufrido una notable reducción en las últimas décadas.
Los “clics” son sonidos sociales que emiten los murciélagos para comunicarse. Estos sonidos son ultrasónicos, es decir, se producen a una frecuencia más alta de lo que el ser humano adulto puede captar. Sin embargo, los jóvenes tienen capacidad de escucha de estos “clics”.
En la última campaña realizada en la Universidad de Navarra el pasado 9 de septiembre los estudiantes fueron clave en la captación de estos sonidos. “Fueron de gran ayuda y se pudo detectar una posible nueva zona de agrupación de la especie “nóctulo mediano” que ni quiera los expertos habrían podido detectar con la ayuda de equipos especializados”.
Una vez identificados estos mamíferos, se produjo el marcaje de algunas hembras con chips para conocer las rutas de viaje que realizan y poder estudiar cuál es su comportamiento migratorio con el paso del tiempo. El marcaje se desarrolla dentro de un proyecto europeo para conocer las migraciones de los nóctulos en toda Europa, liderado por el Instituto Max Planck de Alemania.
Esta iniciativa ha surgido en el marco del desarrollo de las prácticas de las asignaturas “Biodiversidad Animal Aplicada“ y “Métodos en Diversidad Animal y Vegetal”, de los grados de Biología, Ciencias Ambientales y del Doble Grado en Biología y Ciencias Ambientales que se imparte en la Facultad de Ciencias de la institución académica.