La Policía Foral llevó a cabo una intervención inusual en la noche de ayer, cuando sorprendió a un individuo que transitaba por la ciudad con un carro de la compra repleto de plantas de marihuana. La escena, que no pasó desapercibida para los agentes, generó la correspondiente sanción.
Los agentes de la Policía Foral se encontraron con un hombre que, en un aparente acto de despreocupación, presumía de su “carga”. Al ser abordado, el individuo argumentó que el carro era de su madre. La peculiar afirmación de que «el carrico no me quitéis, que es de la madre» no logró evitar que los policías procedieran a la identificación del hombre.
Tras verificar la situación, los agentes formularon una denuncia por infracción a la Ley Orgánica 4/2015, que regula la protección de la seguridad ciudadana. Este incidente destaca la importancia de la vigilancia y el control en la vía pública, especialmente en lo que respecta al tráfico de sustancias ilegales.