Durante el fin de semana, la Policía Municipal de Pamplona ha intervenido en 294 actuaciones, entre las que destacan varios incidentes que requirieron la detención de individuos.
Las actuaciones incluyeron 56 intervenciones por problemas de convivencia, 45 asistencias a personas y 21 actuaciones por ruido, muchas de ellas en domicilios, lo que derivó en denuncias por perturbación del descanso vecinal. A nivel penal, se tramitaron 32 denuncias por delitos menores, como pequeños hurtos y robos en vehículos, y ocho personas fueron detenidas, cinco de ellas por malos tratos en el ámbito familiar. Entre los casos más relevantes, la detención un hombre de 47 años que convivía con su madre octogenaria en San Juan fue arrestado por maltrato en el ámbito familiar, y atentado a la autoridad, tras intentar empujar a su madre frente a los agentes y ponerse agresivo con los policías que actúaban.
En el Casco Antiguo dos jóvenes fueron detenidos en la madrugada del domingo en la calle San Nicolás, zona más cercana a la Plaza del Castillo, por agredir a otro joven, quien fue trasladado al hospital con una posible luxación o fractura de tobillo. Asimismo, una mujer de 42 años fue arrestada por golpear a un hombre con una botella en la espalda en el Monasterio de la Oliva. La víctima fue trasladada en ambulancia al Hospital Universitario de Navarra para su observación.
Un caso de conducción temeraria también fue atendido por los agentes de Policía Municipal de Pamplona, en un parking cerca de la Universidad Pública de Navarra, donde un conductor fue interceptado tras realizar maniobras peligrosas en la vía y sufrir un accidente.