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Proponen declarar Pamplona como una ciudad 30 tras el último atropello mortal

El edil de Movilidad pide tomar medidas rápidas para que no se produzca ni un solo nuevo atropello mortal en Pamplona Tras el atropello mortal producido este martes en la calle Sadar, el edil de Movilidad Urbana […]

El edil de Movilidad pide tomar medidas rápidas para que no se produzca ni un solo nuevo atropello mortal en Pamplona

Tras el atropello mortal producido este martes en la calle Sadar, el edil de Movilidad Urbana y Ecología, Armando Cuenca ha anunciado que planteará declarar toda la ciudad de Pamplona como ‘ciudad 30’ y ha recordado que ya el PP está planteando medidas en las Cortes para recoger que las grandes ciudades sean espacios limitados de velocidad para vehículos.

“Nos hacen falta muchas intervenciones como las de Pío XII, mejorar la visibilidad para el peatón, y finalmente hay que reducir el espacio y la velocidad que le concedemos al vehículo privado, al coche”, ha resumido.

El edil de Aranzadi ha insistido en que hay responsabilidad del consistorio en este tipo de siniestros porque “algo mal estamos haciendo como Administración” y ha recordado que Pamplona y comarca acumula ocho muertos en los últimos dos años, dos de ellos este 2017 y “las causas son como diseñamos las vías y cómo hacemos las calles”.

“Pasar por un paso de cebra nos puede costar la vida” ha dicho Cuenca que ha recordado que se producen 2,8 atropellos por semana en Pamplona y ha insistido en “poner en marcha la visión cero: un muerto en una calle en una ciudad como Pamplona es intolerable”.

Cuenca ha afirmado que la mayoría de los atropellos se producen con víctimas como personas mayores de 65 años, y en pasos de cebra sin semaforizar. “Es triste pero parece que las Instituciones ponen medidas cuando hay accidentes de gravedad”.

Medidas para la calle Sadar

En relación a la calle Sadar, Cuenca ha anunciado que pedirá al resto del equipo de Gobierno y especialmente al área de Seguridad Ciudadana adoptar medidas como reducir las vías a un carril de ida y otro de vuelto, suprimir aparcamientos y poner carriles bici, así como instalar reductores  de velocidad o cojines berlineses, así como la instalación de un radar móvil en la zona.

“Es una apuesta arriesgada, convertir la vía en lo que debe ser esa calle que tiene un tráfico de unos 6.000 vehículos a la hora”, ha insistido.

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