La escuela de defensa personal y artes marciales MUGENDO ha decidido este mes de abril dedicar su programa infantil MUGENKIDS a la tolerancia. Este programa educativo está basado en las artes marciales y avalado por psicólogos y pedagogos del centro. Uno de los motivos de esta decisión es el reciente informe de la UNESCO sobre el acoso escolar y el cyberacoso. Según sus encuestas a nivel mundial, 9 de cada 10 niños y jóvenes consideran el bullying un problema grave: más de el 60% de ellos admiten haber sido víctimas y una tercera parte lo tomaba como normal y no lo contaba.
El informe, “Poner fin al tormento: cómo abordar el acoso escolar, desde el patio del colegio al ciberespacio”, recoge la cifra alarmante de 246 millones de estudiantes que sufren algún tipo de bullying, dos de cada diez alumnos según la UNESCO. Además, aclara, uno de los colectivos más afectados es el LGTBI: un 25% de los encuestados declaró haber sufrido acoso por su aspecto físico y otro 25% por su orientación sexual.
Marta Santos Pais, representante de la Secretaría General sobre la Violencia contra los Niños, anima en el informe a “promover el sentido de responsabilidad de los niños en la prevención de la discriminación y la violencia, en la promoción de la solidaridad, el respeto mutuo y la tolerancia”. En este trabajo, añade Santos, deben colaborar los adultos para “ayudar a construir un ambiente inclusivo donde no se deja a los niños y donde los niños reciben apoyo en la adquisición de habilidades para la vida”.
Desde la escuela MUGENDO, definen la tolerancia como “soportar, ser resistente ante diferentes situaciones y personas. Entender que todos somos distintos, nos portamos diferente, lo aceptamos y nos adaptamos”. Por eso, el programa de MUGENKIDS les ayuda a afrontar situaciones difíciles tanto en el colegio como fuera de él y a ganar confianza para saber responder a este tipo de acoso.
¿Qué es el Mugendo?
Se trata de un arte marcial que fusiona karate, jiu-jitsu y kickboxing. El Maestro Meiji Suzuki, quien perfeccionó el sistema Mugendo, incorporó un método de aprendizaje en grupo o en parejas. Este sistema es diferente a todas las demás artes marciales, en el cual se aprende tanto la técnica como a trabajar en grupo. Los psicólogos y pedagogos de la escuela alaban los beneficios de este arte marcial para los niños.
Por una parte, les ayuda a mejorar en sus relaciones sociales y adquirir sentido de la disciplina y la responsabilidad. Por otro lado, las técnicas aprendidas contribuyen al desarrollo de la coordinación y la psicomotricidad, además de una mejora en la concentración. Este tipo de actividades aumentan la autoestima y la seguridad de los niños, así lo avalan madres y padres que han empezado a llevar a sus hijos al programa MUGENKIDS como Olga, madre de Nico, que le apuntó al ver que “era muy sensible y nervioso” pero nota que “ahora ha cogido mucha seguridad en sí mismo”. También María, madre de Sofía, ha notado la diferencia en el primer mes: “sonreía más, empezó a relacionarse con otros niños que no eran de la escuela y ahora es ella la que nos pide seguir y conseguir el cinturón negro”.
