El riesgo cero de contagio por COVID-19 no existe, pero cuantas más recomendaciones cumplamos, más seguras serán las celebraciones navideñas
Rentokil Initial recoge algunos de los consejos para que las celebraciones navideñas sean lo más seguras posibles.
La higiene del aire debe ser considerada un elemento fundamental en la lucha para minimizar cualquier riesgo de contagio por COVID-19.
Como seres sociales, las personas necesitan mantener relaciones estrechas y continuas con sus familias y amigos para vivir. Incluso en pandemia y a una semana de las fiestas navideñas, muchos españoles están organizando ya reuniones y actividades familiares, pero no se deben dejar de lado las rutinas que se han ido adoptado por el COVID-19.
Estas situaciones en espacios interiores son especialmente peligrosas porque se juntan grupos de personas de diferentes hogares y edades, que pueden no haber adoptado las correctas medidas de prevención. Por ello, la multinacional especializada en higiene ambiental Rentokil Initial da una serie de tips o recomendaciones para que las reuniones se puedan producir con unos niveles aceptables de seguridad.
La primera de ellas sería la realización de una “cuarentena” previa a las fechas señaladas. Esto no significa que no se pueda salir de casa, sino que hay que evitar situaciones de riesgo que impliquen retirarse la mascarilla o permanecer en espacios interiores mucho tiempo. Además, si estas actividades se realizan con otras personas, es aconsejable el uso de mascarillas del tipo FFP2. Teniendo en cuenta los tiempos, si hay niños, tendrían que dejar de acudir al colegio antes del día 22, que es la fecha que marca el calendario escolar.
Los tiempos estimados de esta cuarentena para una efectividad mayor serían 7 días previos a la celebración en el caso de tener posibilidad de realizarse un test de antígenos; sino lo ideal sería extenderla hasta los 10 días.
Otra de las medidas que permitiría llegar con algo más de seguridad y certeza a las reuniones familiares son los test de antígenos, siempre y cuando se hagan en una ventana determinada: entre los 2 días anteriores a la aparición de síntomas y los 5 días posteriores a la aparición. A partir de ahí, su eficacia se reduce. Se sabe que la aparición de síntomas en un contagiado de COVID suele aparecer entre el 2º y el 10º día desde el contacto. Por tanto, si se han hecho 7 días de cuarentena, estando infectado justo del día antes, se estaría dentro de la ventana del test en la que es fiable.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), debido a la segunda ola de coronavirus activa en Europa y al riesgo de una tercera a principios de 2021, aconseja el uso de mascarillas incluso durante las reuniones familiares navideñas. Durante la cena se recomienda el uso de mascarillas FFP2 todo el tiempo, excepto para la comida. Por el día, lo ideal sería tener las ventanas abiertas buscando ventilación natural y cruzada, es decir, que haya corriente. Además, los comensales deberán estar más espaciados de lo habitual y manteniendo un volumen de conversación bajo. En el caso de disponer de terraza o jardín, se recomienda trasladar las reuniones a esas zonas de la casa.
Puede parecer de Perogrullo, pero si una persona presenta síntomas compatibles con un posible contagio por COVID-19, ha dado positivo o ha estado en contacto con un positivo, debería abstenerse de acudir a estas celebraciones.
Todas estas recomendaciones, además de las principales como lavarse las manos y mantener la distancia social de dos metros, ayudarán a proteger nuestra salud. Sin embargo, está comprobado que el virus puede transmitirse también por vía aérea a través de aerosoles. Por ese motivo, la higiene del aire debe ser considerado un elemento fundamental en la lucha para minimizar cualquier riesgo de contagio por COVID-19. En ese sentido, Rentokil Inital recomienda la complementación de estas medidas con purificadores de aire, como el InspireAir 72 o el Vectothor Air160.
Estos sistemas, que deberán estar homologados y provistos de filtros HEPA13 (filtro de aire de partículas de alta eficiencia, por sus siglas en inglés), pueden ayudar a eliminar los contaminantes suspendidos en el entorno, ya que absorben el aire, lo desinfectan para, finalmente, devolverlo a la habitación libre de patógenos en más de un 99%. El resultado de este proceso es una higienización integral del ambiente que se respira, el cual queda libre no solo del COVID-19, sino también de malos olores e impurezas como agentes químicos, polvo, humo, polen, humedad, parásitos, hongos, bacterias, etc.
Todas estas recomendaciones no tienen otro objetivo que velar por nuestra salud, que es una prioridad siempre, pero más aún en fechas señaladas como la Navidad. En resumen, las medidas serían:
- Restringir al máximo las interacciones sociales previas al evento
- Realizar un test de antígenos
- En la celebración:
- Higiene de manos (lavado + gel hidroalcohólico)
- Uso de mascarillas FFP2 el máximo posible del tiempo
- Mantener la distancia social en la mesa. Si se puede hacer al aire libre, mejor.
- Hablar en un tono moderado – evitar cantar.
- Ventanas abiertas y ventilación cruzada.
- Instalación de un purificador de aire homologado.
Y finalmente, ante cualquier duda, mejor dejar la celebración para otro momento más idóneo. El riesgo cero de contagio por COVID-19 no existe, pero cuantas más recomendaciones se cumplan, más seguras serán estas atípicas celebraciones navideñas.
Fuente Comunicae