Decenas de heridos, accidentes y percances varios en el mítico Sambódromo de Río de Janeiro: ni las celebraciones del Carnaval más famoso del mundo consiguen sacar este año a Brasil del todo de la depresión.
Considerado por muchos como el momento culmen del año carioca, los desfiles de las mejores escuelas de samba se vieron opacados en los dos días en que se celebraron por graves accidentes.
Después de que un carro alegórico se estrellase el domingo y dejase 20 heridos, un nuevo percance con una carroza dejó a otras 12 personas heridas en la madrugada del martes en la célebre pasarela con espacio para unos 72.000 espectadores en el centro de Río.
El accidente ocurrió cuando la estructura superior de un carro de la escuela de samba Unidos da Tijuca cedió, en pleno desfile, y se desplomó con varios bailarines encima. Los heridos tuvieron que ser evacuados de la pista por los servicios sanitarios.
Algunos participantes apuntaron a un exceso de peso como posible causa. «Hacíamos un ensayo por semana en el carro desde diciembre», dijo al portal «Globo» Leonardo Alves, uno de los bailarines que estaba sobre el vehículo.
«Hoy tenía por lo menos el doble de personas, más peso en el carro, por causa de composiciones no coreografiadas en los laterales», agregó el comparsa. La carroza siniestrada llevaba encima una representación alegórica de la ciudad de Nueva Orleans, con pomposas y pesadas estructuras encima.
El accidente no fue el único percance de la noche. La escuela Uniao da Ilha, la primera de las seis que desfilaban el lunes, tuvo problemas con su primer carro, que se atascó al entrar al Sambódromo y avanzó luego sólo con visibles dificultades por la pista.
Los problemas condujeron a que la escuela sobrepasase en un minuto los 75 minutos, controlados estrictamente por reloj, que tenía para su presentación. En total 12 escuelas desfilaron por el Sambódromo domingo y lunes a lo largo de toda la noche hasta el amanecer, como es tradición en el carnaval carioca.
Y mientras muchos se preguntaban por las razones de esa serie de accidentes, la Liga Independiente de Escuelas de Samba de Río (Liesa), el principal organizador de los desfiles, aseguró que habrá una investigación de lo ocurrido.
«En 33 años de existencia del Sambódromo, inaugurado en 1984, hubo pocos incidentes de esa naturaleza que involucrasen a carros alegóricos y estamos esperando la conclusión de la investigación para esclarecer las causas», señaló Liesa en un comunicado.
Las investigaciones preliminares indicaban que el primer accidente con el carro de la escuela Paraíso de Tuiuti, ocurrido en la noche del domingo, se debió a problemas con las ruedas giratorias del vehículo.
El conductor perdió el control de la carroza al entrar a la pasarela y ésta se estrelló, consecutivamente, con vallas laterales a ambos lados de la pista. Varias personas criticaron que los organizadores decidieran reanudar el desfile tras una hora. Cinco víctimas de los dos accidentes seguían internadas hoy.
El Carnaval de Río también se vio afectado por la crisis económica brasileña este año. Para esta edición se inscribieron 452 «blocos», como se conoce a las bandas de samba que celebran en fiestas callejeras, unos 50 menos que el año pasado.
También las escuelas tuvieron que reducir el pomposo despliegue de sus espectáculos por falta de presupuesto, llevando también a menos bailarines de lo habitual al Sambódromo.
Los grupos, muchos de ellos originarios de los barrios más pobres de Río, las favelas, participaron con unos 3.000 bailarines cada uno en la gala. Las escuelas se preparan minuciosamente durante todo el año para el momento.
La escuela ganadora será premiada en la tarde de hoy. La campeona de 2016, Mangueira, es considerada otra vez como una de las favoritas, así como Portela, ganador récord del Carnaval carioca con 21 títulos.
